Pilates: la combinación perfecta entre el bienestar mental y corporal

Cada vez somos más las personas que decidimos probar ésta actividad. Jóvenes que fueron al gimnasio toda su vida y quieren probar algo distinto, mujeres y hombres que están en la tercera edad y quieren mover el cuerpo, e incluso personas que están en rehabilitación y necesitan recuperar la movilidad. En los estudios de Pilates hay lugar para todos. Si querés saber qué beneficios puede aportar esta disciplina a tu vida, ¡ésta nota es para vos!

Todos toman clases de pilates, y quienes no lo hacen, recomiendan a otros a hacerlo. Chicas jóvenes, madres adultas, jubiladas y hasta deportistas profesionales asistenten a esta clase.

Por eso charlamos con Dana Luna, instructora de pilates, que nos cuenta las ventajas de practicar esta actividad y como es útil para la salud física y mental.

¿Qué es Pilates?

“Es un método progresivo, dado que requiere coordinación y control, los cuales se van adquiriendo poco a poco. Tiene como objetivo fortalecer el cuerpo mediante el dominio mental, la relajación y la respiración”, nos informa Dana, nuestra instructora entrevistada.

Es una actividad en la que se combinan técnicas de gimnasia, ballet y yoga, por lo que es ideal para aquellos que buscan combinar un poco de cada disciplina.

Dana nos cuenta que entre los beneficios que otorga Pilates podemos encontrar movilidad articular, elasticidad, respiración consciente, fuerza muscular en el centro corporal (lo que sería la zona abdominal), lo cual es esencial tanto para personas jóvenes, como para personas mayores.

Ésta disciplina genera una importante corrección sobre la postura, y, además, en las mujeres, fortalece el suelo pélvico. ¿Qué es el suelo pélvico? es un grupo de músculos y otros tejidos que forman una especie de hamaca a través de la pelvis. En la mujer, mantiene el útero, la vejiga, los intestinos y otros órganos pélvicos en su lugar para que puedan funcionar adecuadamente. Por lo tanto, en las mujeres que están entrando a la 3ra edad, fortalecer el suelo pélvico es fundamental para evitar pérdidas. En cuanto a las embarazadas, éste tipo de ejercicios facilitan el parto.

Pero, señala Dana, lo más importante es “la conexión con el cuerpo de uno mismo”, ya que eso “no lo logras con ninguna otra actividad”.

Y es que la conexión con el cuerpo viene porque es una actividad que está continuamente ligada al bienestar mental, a la desconexión con el mundo exterior. Dana asegura que una clase de Pilates también es un “momento de descanso y relax para despejarse de los problemas de la vida cotidiana”.

¿Cuáles son los cambios visibles que podés observar en tu cuerpo al tiempo de haber comenzado a tomar tus clases de Pilates?

Para empezar, como mencionamos anteriormente, uno de los principales beneficios que ofrece ésta disciplina es fortalecer la zona abdominal. Por lo tanto, el primer cambio que vas a notar en tu cuerpo es una gran tonificación de los músculos centrales (abdominales, espalda baja y glúteos). Dana nos explica que “al no ser una actividad de impacto, se trata de generar masa muscular”, siendo las piernas y brazos “los principales focos”.

En cuanto a los cambios a largo plazo: se puede ganar elasticidad como si hicieses una clase de stretching, pero lo más importante: dejas de estar encorvada/o y con los hombros para adentro, porque tu postura cambia, se corrige y rectifica.

¿Qué diferencias hay entre Pilates y el gimnasio convencional?

Dana nos explica que la diferencia principal es que el trabajo en Pilates es “mucho más lento y focalizado” que en un gimnasio.

Mientras en el gimnasio todo se trata de series y repeticiones, en Pilates eso no importa mucho. Lo más importante, asegura la profesional, es “lograr una repetición que sea efectiva”. Es decir, el foco no está en la cantidad de veces que se repita un mismo ejercicio, sino, nos enseña Dana, “en la técnica y en si se activan los músculos correspondientes”.

Pero, en definitiva, todo se trata de cuáles sean tus objetivos. Si lo que buscas es hacer actividad física de una manera más calmada y relajada, tonificar y elongar tu cuerpo, corregir tu postura, aliviar dolores y recuperarte de lesiones, probablemente Pilates sea la mejor opción.

Por otro lado, el gimnasio ofrece un enfoque más tradicional. Implica el uso de máquinas y pesas, lo que convierte esta actividad en una opción más popular para las personas que buscan bajar de peso rápidamente y aumentar fuerza muscular.

¿Y qué pasaría si combinamos Pilates con gimnasio? Seguramente vas a mejorar la calidad de tus rutinas, vas a conseguir definir más rápido tu cuerpo y, por supuesto, lograrás un equilibrio entre el bienestar mental y corporal.

A fin de cuentas, todo se trata de escuchar nuestro cuerpo y sus necesidades. Detener la locura de nuestro día a día y encontrar un ratito para dedicarnos a nosotros mismos. Y vos, ¿ya encontraste tu actividad ideal?